¡Wao! Ahora Sí Entiendo Biblia

Recuerde que los fondos históricos de Josué, Jueces, Rut y Samuel son en la misma época; estos libros pertenecen a un mismo período; son libros unidos entre sí; aquí en 1 y 2 de Samuel se cuenta la historia de David.  Me gusta recordar que el Antiguo Testamento es una verdadera saga de libros donde su contenido es enorme y su arreglo es perfecto; los libros que hemos seguido hasta ahora son libros conectados, son los libros de historia. Todo se conecta, todo encaja y no deja vacíos. Las historias de los libros de Samuel son un contenido extenso, pero será más fácil si dividimos la lectura en seis partes: (1) la vida de Samuel, (2) la vida de Saúl, (3) la aparición de David, (4) los primeros años de David, (5) los años intermedios de David y (6) los últimos años de David. Ya estudiamos las tres primeras partes, ahora veamos las ultimas tres.  4. La primera época del rey David (2 Sam 1:17-7:29) Un lamento por Saúl y Jonatán > David se convierte en rey de Judá > El con

Recuerde que los fondos históricos de Josué, Jueces, Rut y Samuel son en la misma época; estos libros pertenecen a un mismo período; son libros unidos entre sí; aquí en 1 y 2 de Samuel se cuenta la historia de David. Me gusta recordar que el Antiguo Testamento es una verdadera saga de libros donde su contenido es enorme y su arreglo es perfecto; los libros que hemos seguido hasta ahora son libros conectados, son los libros de historia. Todo se conecta, todo encaja y no deja vacíos. Un breve resumen hasta ahora: Dios escoge a un hombre para iniciar su reino. Llama a Abraham quien engendró a Isaac; luego Isaac engendro a Jacob; Y Jacob engendro 12 hijos cuyos descendientes pasaron 400 años en Egipto como esclavos y crecieron de 70 miembros a 2,5 millones. Allí la descendencia de Abraham, Isaac y Jacob fueron hechos esclavos y mano de obra del faraón que los oprimía sin piedad; entonces surge en ellos la necesidad de la salvación. Y llega Moisés como el libertador de los isr

Recordemos que Dios hizo “al pueblo” a través de Abraham, dio “la ley” a través de Moisés y dio “la tierra” a través de Josué. Dios construyó una nación para que se convirtiera en un reino capaz de influenciar a otras naciones del mundo. Inmediatamente después del libro de Josué, la historia continua en el libro de Jueces.  Después de la muerte de Josué y de los ancianos líderes, nace una nueva generación; un pueblo que no cumplió el pacto con Dios, que no obedecieron el mandato de Dios de destruir todos los altares de otros dioses y de no permitir que otros pueblos se quedaran y se mezclaran con ellos; al contrario empezaron a adorar a otros dioses falsos como Baal y Asera; haciendo lo que a Dios no le agrada; el pueblo abandonó al Señor y por eso Dios permitió que otros pueblos enemigos los atacaran y saquearan nuevamente (Juec 2:1-15). Dios dejó otros pueblos para ponerlos a prueba; no expulso a las otras naciones para que la nueva Israel aprendiera y conquistara.  Israel

El gran servidor Moisés murió tras dar su ultimo sermón (Deuteronomio: el sermón de despedida de Moisés al nuevo pueblo de Israel, la segunda generación), allí en ese sermón Moisés reitera en recordarles la obediencia a Dios.  Ahora los israelitas debían seguir a Josué (soldado del Señor y sucesor escogido por Moisés) y entrar a la tierra de Canaán atravesando el Rio Jordán. Entonces el pueblo se levantó del campo de Moab, dejando en Transjordania (Este del Jordán -un territorio conquistado a los Amorreos); Las tribus de Rubén, Gad y ½ Manases se establecieron allí. Estas familias no cruzaron el Jordán, pero sus guerreros alrededor de 20 años si debían ayudar en la conquista del Oeste del Jordán (Canaán). Cuando oigas mencionar el libro de Josué recuerda “conquistando la tierra”; la misma tierra donde habitaron Abraham, Isaac y Jacob y Dios; la tierra prometida a ellos que Dios quería dar a su pueblo nuevamente (Génesis 15:16). Dios sigue siendo fiel en su pacto (Génesis 15:1